FUI TESTIGO…
Elder Exvedi Morales Mérida
A mi abuela Ana Olimpia Taracena
(1994)
Fui testigo
de cómo el tiempo se encargó
de ir pintarrajeándole de nieve
el cabello a mi madre
y de desparramar
arrugas
en su piel.
Fui
testigo
de cómo el tiempo se encargó
de robarle luz a sus ojos,
de hurtarle
fuerzas a sus pasos,
de robarle latidos a su corazón
y de
depositar en sus labios
abecedarios más dulces y sabios.
Fui testigo
de cómo el tiempo se encargó
de ir acercándola más a Jehová Dios
y de ir distanciándola de la tierra
y de
todo aquello que nos es prestado…,
puesto que aquí
estamos de paso...
Fui testigo
de cómo el tiempo se encargó
de unirme más a ella
y de descubrir tantas lumbreras,
misterios maravillosos,
enigmas serenos
y la sonrisa de Dios.
Soy testigo
del amor inmenso
del
Supremo Creador.